lunes, 25 de junio de 2012
CONVOCATORIA: Fortalecimiento de Espacios para la Investigación en Ciencia y Tecnología
martes, 2 de marzo de 2010
Proyecto LOCTI "Desarrollo de una laboratorio de pruebas, entrenamiento y operación de sistemas automotrices"
jueves, 18 de febrero de 2010
Dinamómetro de Rodillos
Para la realización del ensayo se colocan las ruedas motrices del vehículo sobre los rodillos. Seguidamente se fijan los sistemas que garantizan que el vehículo permanezca inmóvil durante el ensayo. Se arranca el motor y comienza la prueba, la cual se desarrolla en una marcha determinada, por lo general 3ra. o 4ta. Se parte desde un número bajo de rpm y se acelera a fondo hasta el número de máximo de rpm deseado, allí se libera el acelerador y el motor retorna paulatinamente al régimen de inicio. El rodillo, de alta inercia y volumen, recibe la potencia de las ruedas motrices, y un sistema de captura de datos y un software especializado muestran en la pantalla de una computadora los resultados obtenidos en forma de gráficos y tablas.
Con un banco de rodillos, se puede determinar si el motor de un vehículo cumple con las especificaciones señaladas por el fabricante, así como también, evaluar la influencia de modificaciones mecánicas o electrónicas, sobre el rendimiento del motor, sin tener que desmontarlo.
Frenada Asimétrica
Con el sistema de frenos ABS no sólo se consigue evitar un bloqueo de las ruedas, si no que también se detiene el vehículo sin problemas en frenadas en las que las ruedas pisan sobre superficies con deslizamiento desigual. Podemos dar como ejemplo el de una frenada en la cual las ruedas de la derecha pisan arena o tierra acumulada sobre la calzada mientras que las izquierda lo hacen sobre un asfalto seco. En esta situación al frenar a fondo sin ABS se producirá una peligrosa patinada que hará girar el frente del vehículo hacia el centro de la calzada ya que las ruedas de la izquierda debido a la arena se deslizarán a mayor velocidad que las de la derecha. Si el vehículo dispone de ABS el sistema se encargará de equilibrar la situación y no se producirá ningún trompo.
En el siguiente video, se aprecia lo que puede ocurrir durante una frenada asimétrica brusca, si se tiene el ABS desconectado.
Pruebas de Choque
El Euro NCAP realiza cuatro pruebas para determinar el comportamiento de cada automóvil en un choque, y analizar así su seguridad pasiva.
Los vehículos que se usan deben ser idénticos a los que están puestos a la venta, y deben poder moverse por sus propios medios.
Choque Lateral: En esta prueba el coche está quieto, y contra él impacta (en el lado del conductor y perpendicularmente) un carro que lleva en su parte delantera una barrera deformable de 1.500 mm de ancho y 500 mm de fondo. El punto de choque (R-point) es aquél que tiene un 95% de posibilidades de estar situado un conductor varón. En este test solo se usa un maniquí conductor, diferente en su configuración al usado en el choque frontal. La velocidad del choque es de 50 km/h.
Atropello: Para comprobar el comportamiento de un coche en los casos de atropello, y los daños que puede recibir un peatón, se hacen varias simulaciones, con muñecos que asemejan niños o adultos, a una velocidad de 40 km/h. En los resultados se tienen muy en cuenta los golpes contra las piernas y cabeza, así como posibles aristas o salientes agresivos.
Este poste es estrecho para simular una mayor penetración en el coche, y está colocado a la altura de la cabeza del conductor. Con esta prueba se ha demostrado que el criterio de daños en la cabeza baja de 5.000 sin airbag lateral hasta menos de 300 con él. A partir de un valor de 1.000, existe la posibilidad de muerte. En estos momentos es una prueba opcional, que se puede realizar cuando se haya obtenido buena calificación en la prueba de impacto lateral.
El en video que se muestra continuación, un Mazda 6 se somete a diferentes pruebas de choque.
Prueba de Slalom
Esta prueba se hizo bastante famosa en el año 1997, cuando un Mercedes Clase A acabó volcando al realizarla.
Para llevar a cado la prueba, se colocan 9 conos espaciados a 18 metros, con las células de cronometraje situadas a 6 metros del cono inicial y del final, lo que en línea recta supone 156 metros. Se comienza el ejercicio en la célula de entrada a unos 60 km/h, pero se sube la velocidad buscando realizar la prueba en el menor tiempo posible.